La salud ambiental: transformadora de mercados y la sociedad

La salud ambiental: transformadora de mercados y la sociedad

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) el 23 % de las muertes en el mundo están relacionadas con el medioambiente; 65% de ellas se deben a enfermedades no transmisibles o traumatismos consecuentes de diversos factores de riesgo ambientales, como la contaminación del aire, el agua y el suelo, la exposición a los productos químicos, el cambio climático y la radiación ultravioleta.

 

Una radiografía que muestra un planeta en crisis. Es por ello, que de ahí surge una de las disciplinas que ayudan a remediar estas dificultades, como la salud ambiental.

 

Para resolver las inquietudes que tenemos sobre esta ciencia, el director de la Maestría de Salud Ambiental de la Universidad El Bosque, Gabriel Tadeo Rodríguez, nos explica cómo este programa ayuda a transformar la sociedad, la calidad de vida y salud, con las siguientes respuestas:

¿Qué es la salud ambiental?
Basados en el concepto de la Organización Mundial de la Salud, en la Universidad del Bosque la definimos como los aspectos de salud y bienestar de los ecosistemas que, directa o indirectamente, afectan la calidad de vida y la salud humana. Dichos aspectos están determinados por los factores físicos, químicos, biológicos, sociales y psicosociales del medioambiente.

 

¿Cuáles son las áreas claves que abarcan las diversas formas en que la salud ambiental es crucial para la salud de las comunidades?
Estas áreas claves corresponden a lo que en la Universidad el Bosque llamamos esferas. Dichas esferas corresponden al aire, agua, suelo y vida. La alteración o daño de estas esferas (generalmente producidos por el hombre) ocasionan un impacto negativo (a corto, mediano o largo plazo) en la salud, tanto a nivel individual, como colectivo o comunitario.

 

¿Cómo influye la salud ambiental en la transformación del mercado?
Mas que en la transformación del mercado, influye en la transformación de la sociedad. La salud ambiental, como una rama de la salud pública, tiene la posibilidad de afectar los determinantes sociales y ambientales de la salud, a nivel individual, comunitario y social. Así, como lo afirmó uno de los padres de la salud pública Rudolf Virchow, el intervenir en el área, representa el accionar, en cierta forma (directa o indirectamente), en medicina social y comunitaria a gran escala.

 

¿Cómo la salud ambiental impacta nuestra calidad de vida y salud?
La inadecuada salud ambiental impacta de muchas formas en la calidad de vida y la salud humana. Así, el daño medioambiental (incluyendo la emisión de materiales tóxicos) está ocasionando una cantidad de alteraciones en los diferentes entornos que terminan afectando la salud humana, siendo el cáncer uno de los efectos más sobresalientes. Otro ejemplo (entre varios) lo tenemos con el efecto negativo (neurológico y endocrino) por el uso indiscriminado de plaguicidas.
Así mismo, la abrupta invasión del hombre a los ecosistemas (disturbio ecológico) está ocasionado el surgimiento de nuevas enfermedades, tales como la leptospirosis (enfermedad por la bacteria Leptospira), la influenza aviar (virus de las aves), la enfermedad del SIDA, la influenza porcina y más recientemente, el virus Covid-19 (origen de la actual pandemia).

 

¿Qué pueden hacer los egresados de la Maestría para que la humanidad tome conciencia frente a la problemática ambiental del planeta?
Acá se aplica el viejo adagio “Es mejor prevenir que curar”. De esta forma, la universidad proyectó el perfil de nuestros egresados en salud ambiental, como eminentemente preventivo. Bajo este accionar, el egresado tendrá una gran responsabilidad social, comunitaria y corporativa, haciendo énfasis en programas educativos, de concienciación y sensibilización. Igualmente, en su rol de liderazgo estará a cargo de planear (proponer), apoyar la implementación y desarrollo de políticas públicas y planes de desarrollo sectorial (ambiental) en sus comunidades.

 

¿Qué debemos hacer para que en un futuro tengamos una buena salud ambiental?
Tener más contacto y vivir en armonía con nuestro entorno. Debemos efectuar una explotación de nuestros recursos naturales de forma responsable y meramente necesaria. Ello implica cambiar nuestra interacción con la naturaleza o pagar (nosotros o las nuevas generaciones) las consecuencias futuras, tal como ya lo estamos viendo con los fenómenos del cambio climático y calentamiento global.

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