¿Cómo la infotecnología y la biotecnología nos traerá más beneficios que riesgos?

¿Cómo la infotecnología y la biotecnología nos traerá más beneficios que riesgos?

Cada vez hay más empresas con el deseo de automatizar sus procesos, particularmente en la fabricación, logística y distribución de sus productos, por lo cual es indispensable comprender cómo esta revolución puede aumentar la fuerza laboral, en lugar de reemplazarla.

 

Aunque probablemente se perderán algunos empleos debido a la implementación de las nuevas tecnologías, el Foro Económico Mundial asegura que en el 2025 se generarán más de 133 millones de empleos a causa de estos cambios.

 

La industria robótica tiene el potencial de revolucionar la productividad, mejorar la precisión y liberar nuevos niveles de eficiencia, si se lleva a cabo de la manera correcta. Sin embargo, la tecnología es solo una parte de la solución general para beneficiarse de estas ganancias. Las empresas también deben considerar que sus trabajadores deben estar cualificados para que al mismo tiempo puedan transformar la productividad.

 

Mejorarla no solo significa hacerlo directamente dentro de la producción, sino también tener en cuenta dónde se puede implementar la automatización de manera efectiva para obtener las mejoras y de esta manera, instruir a las personas para que asuman nuevas tareas, siempre y cuando haya alguna capacitación idónea para ello.

 

Según Mauricio Sánchez, coordinador en la Maestría de Bioética y de la Cátedra Abierta de Bioética de la Universidad El Bosque, la infotecnología y la biotecnología proponen herramientas disruptivas que generan beneficios y riesgos. Algunos de los múltiples riesgos generados no solo llegarían a profundizar en el tema de la explotación laboral, sino que podrían generar la irrelevancia de grandes cantidades de personas en el planeta.

“Como nos recuerda el profesor Harari, estamos enfrentando una nueva amenaza producida por la fusión de las revoluciones infotecnológica y biotecnológica, a saber, la irrelevancia de las personas. Al hablar de ingeniería genética, transhumanismo, poshumanismo, algoritmos, inteligencia artificial, habeas data y big data, entre otras categorías propias de estas dos revoluciones, grandes cantidades de personas sienten que no tienen nada que ver con eso, no entienden ese lenguaje y como consecuencia, sin la preparación adecuada, probablemente puedan quedar por fuera del modelo de mercado que tenemos en la actualidad. Lo peor, es que no hay un panorama alentador, no existe aún un discurso que sea producto de un gran consenso, con el cual sea posible brindar algunas indicaciones de cómo podríamos manejar esta situación para proteger la justicia social. Siento que la bioética puede aportar mucho en esta situación”, asegura.

 

Una encuesta realizada por el Foro Económico Mundial entre directores de recursos humanos y los principales ejecutivos estratégicos de empresas pertenecientes a 12 sectores y 20 economías desarrolladas y emergentes reveló que el 54 % de los empleados de las grandes empresas necesitaría reciclar y mejorar sus capacidades considerablemente para aprovechar al máximo las oportunidades de crecimiento que ofrece la Industria 4.0. Al mismo tiempo, un poco más de la mitad de las empresas encuestadas declararon que planeaban recualificar solo a los empleados que desempeñan puestos clave, mientras que solo un tercio planea dar la oportunidad a trabajadores en alto riesgo para que se capaciten.

 

“Lo preocupante es que mientras nos detenemos a pensar en esto y a construir los discursos que nos permitan tener unas posiciones éticas dotadas de estructuras argumentativas sólidas para hacer frente a esta realidad, nos vamos a tardar mucho tiempo. No le estamos prestando la suficiente atención a este tema y mientras las sociedades abren los espacios para este tipo de reflexiones tan necesarias, muchos ingenieros continúan trabajando con una serie de herramientas que están cambiando el mundo en lo práctico. Con las fuerzas del mercado que van a mil, ni los ingenieros que mencionaba, ni las fuerzas económicas que actúan en este modelo, van a esperar a que otros sectores de la sociedad avancen en ese tipo de reflexiones que buscan evitar la irrelevancia de muchísimas personas en el modelo de mercado”, agrega Sánchez.

 

Por lo tanto, es imperioso que la evolución de la automatización cree un entorno operativo efectivo que combine la tecnología con una fuerza laboral capacitada, comprometida y motivada.

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