Las carreras de educación aceptan el reto de la enseñanza híbrida

La crisis sanitaria por la Covid-19 marcó un hito en todas las modalidades de educación, al brindar la oportunidad de compartir herramientas tecnológicas que en algún momento se demonizaban e incluso se prohibían en los entornos escolares. Sin embargo, el paso a la enseñanza a distancia destacó el uso de las mismas para acceder al aprendizaje que solo estaba disponible en línea.

Luego de la pandemia, no hay duda de que estas tecnologías deberán continuar y en las facultades de las universidades deberá existir una enseñanza híbrida que ayude al aprendizaje. Lo mismo sucederá con los aspirantes a las carreras de educación, quienes deberán entender que la educación hibrida es el futuro.

Según Fidel Mauricio Ramírez Aristizábal, director de posgrados en Educación de la Universidad El Bosque, efectivamente las medidas tomadas en el marco de la pandemia del Covid-19 ha implicado una reflexión pedagógica y concretamente acerca de la importancia de los encuentros presenciales, en ciertos momentos de la formación, tanto en pregrado, como posgrado y obviamente, en la educación básica y media.

Si bien el encuentro entre los sujetos, en las instituciones educativas es muy importante, también se vio que es posible desarrollar actividades formativas, a través de mediaciones, como lo son la Internet, que permiten una mayor participación, superando las barreras de tiempo y espacio.

“Creo que de manera positiva logramos entender esto, pero también a niveles de cuestionamiento frente a la formación que tienen los maestros y maestras para asumir estos retos. Quedó en evidencia que, efectivamente hacen falta programas que ayuden a los maestros a entender esas lógicas, porque efectivamente la educación virtual no se trata simplemente de pasar una clase presencial a la mediación virtual o utilizar unos talleres que antes se llevaban a cabo en aulas de clase, subirlas a través de una plataforma o desarrollarlas a través de Zoom o Meet”.

“Es importante que se entienda que la educación híbrida y especialmente mediada por tecnologías, tiene unas lógicas distintas en este sentido. Los maestros debemos generar procesos que permitan una narrativa transmedia. Ya no solamente se trata de generar contenidos para que los estudiantes los consuman, sino que los alumnos hagan parte de la construcción de los mismos, para generar conocimientos, a través de estos espacios colaborativos entre ellos, entre pares y con el docente”, asegura Ramírez.

De ahí que las universidades desde ahora comenzaron a actualizar los planes de estudio que respondan a la urgencia de generar y desarrollar competencias de cara a estos desafíos multimedia y transmedia que nos presenta la educación actual y del futuro.